martes, 12 de junio de 2018

La moderación es una mierda

Lo primero, un concepto a tener bien claro:

“La clave está en comer variado, de todo con moderación” es un mensaje hipócrita, vendemotos y con un único fin: que no dejes de gastar dinero en mierdas ultraprocesadas que hacen flaco favor a tu salud y engordan (entre otras muchas consecuencias) tu cuerpo y el bolsillo del que te la cuela.

Cansada de que metan con calzador esta sentencia nutricional en todas las publicidades de mierderproductos. Pero más cansada aún, y triste, de que la gente de la calle se lo siga creyendo.

Hace unas semanas, alguien (no recuerdo quién, en absoluto) tuvo un cruce de tweets conmigo (o más bien me intentaba dejar mal porque él/ella tenía la razón perpetua) que decían algo así:

Persona X: Qué pesados sois con que no se pueden comer galletas o bollos o chucherías. ¡Lo importante es la moderación!

YO: ¿Y qué es la moderación?

X: Eres una experta en nutrición y no sabes lo que es la moderación, pues vaya…

YO: No soy experta en nada. Y no, no sé lo que es “moderación”. ¿Me lo puedes explicar?

X: Pues está claro, no comer mucho de algo. No es tan difícil, un profesional de la nutrición debería saber eso.

YO: ¿Y cuánto es mucho de algo? ¿2 unidades? ¿50gr? ¿1/2 barra?

Y así nos podríamos haber embarcado en un absurdo círculo vicioso en el que X no aportaba nada interesante y yo, que me gusta un poco picar, no dejaba de hacerme/le preguntas. Menos mal que pasé.

Pero es que la historia es así. Si te pregunto a ti qué es comer de algo moderadamente es muy probable que termines cayendo en la misma respuesta fácil que la persona X.
Yo tengo mi respuesta: la moderación es una mierda. Un autoengaño. Un “moderación es lo que me salga del alma a mí, porque yo como con moderación”. Moderación es ese amigo traicionero que te invita a tomar un café y luego te la clava bien por la espalda.

No nos engañemos, estamos ante un problema REAL actual ante el cual no podemos actuar siendo blandengues y suaves. Lanzarle a la gente el mensaje de que estar sano es comer de todo, pero sin pasarte, es no decirle una mierda.

Porque “moderación” para mí pueden ser dos galletas y para otro ocho y para otro medio paquete. O peor aún, todos sabemos que las galletas no son buenas pero como se puede comer de todo con moderación pues las tengo en casa. Y tomo dos para desayunar, otras dos
para la media mañana, otras dos para la merienda y otras dos para el postre de la cena. Porque yo controlo, porque HAY QUE comer de todo, pero con moderación.
Y a eso le añades un POQUITO (¿alguien me explica qué es un poquito?) de azúcar moreno (porque todos sabemos que es mucho mejor) al café, un PEDACITO (¿alguien me explica cuánto es un pedacito?) de pan en la comida, otro en la cena y puede que otro en el desayuno, porque dónde voy desayunando solo dos galletas, habrá que tomarse también una tostadita con un PELÍN (¿hago otra vez la pregunta?) de mermelada y margarina (que es vegetal y ser veggie es muy top).

Y un huevo. (Por cierto, con los huevos sí que preguntáis por una cantidad más concreta. Pero eso es otro tema…)

Ante una fuerza súper potente como es la industria de los mierderproductos (no TODA la industria, que luego vienen los “eres una quimiofóbica porque odias la industria uuuuu” por favor, ya somos mayorcitos como para tergiversar los mensajes como nos sale del ciruelillo) que lanza miles de mensajes diarios, nosotros tenemos que hacernos todo lo grandes, serios y claros que podamos.

HAY PRODUCTOS COMESTIBLES QUE SON MALOS
CON ELLOS NO DEBERÍA EXISTIR UN MENSAJE MODERADO
NO, NO ES EXAGERADO.

Exagerada e increíblemente apabullante es la cifra de obesidad, y sus enfermedades asociadas, que estamos sufriendo. Contra eso, el mensaje general sobre qué puedes comer debería (siempre a mi parecer) ser muy diferente al de la pesadísima pirámide alimenticia oficial y sus oficiales consejos que no valen nada.

Hay muchas posibilidades y planificaciones que pueden ayudarte a comer saludablemente. Yo, como persona individual, te paso mi idea.
(Fuente: propia alimentación de Nutrienterate)

No es mejor ni peor que la de muchos, solo es una opción válida para empezar. Y a partir de ahí, si necesitas ayuda, acude a un profesional de nutrición que no tenga conflictos de interés.
(Podría hablar mucho sobre mi idea de estado saludable de las personas y lo haré pronto. Pero, de momento, me voy a limitar a hablar sobre cómo empezar a alimentarse).

Pd: Tu médico de cabecera seguro que sabe muchas cosas, pero (casi) seguro que sabe poco o nada de nutrición actualizada. Si le pides consejo y rápidamente te obsequia con una “dieta de cajón” dale las gracias, devuélvele la hoja y (sería maravilloso esto último) anímale a seguir aprendiendo.

2 comentarios:

  1. No podría estar más de acuerdo en todo lo que dices. El discurso de la moderación solo debería ser aplicable a alimentos sanos (puedes comer chuletones, pero no te apretes cuatro de una sentada; puedes comer plátanos, pero a poder ser no seis al día; puedes comer frutos secos, pero no te comas un kilo viendo una peli, etc). Todo lo ultraprocesado debería estar excluído de la moderación. Creo que es clave para aprender a comer bien. Tener claro que no hay moderación posible, que lo ultraprocesado es malo y que solo debería ser de consumo ocasional.

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  2. ¡Gracias por tu comentario David!
    Ojalá algún día todos nuestros enfados sirvan para algo :)

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